El próximo Sábado 4 de Agosto, se llevará a cabo la ceremonia de inducción al salón de la fama NFL de la generación 2018. Año con año, esta ceremonia marca el inicio "formal" de la temporada y tenemos el honor de escuchar a verdaderas leyendas del juego en la culminación de sus carreras.
Pero este año, por lo menos para nosotros, es distinto, y no porque no estemos acostumbrados a encumbrar a nuestras leyendas (no por nada, somos el equipo que más inmortales tiene en Canton).
Este año es distinto porque veremos, escucharemos y homenajearemos a uno de nuestros referentes, al que fue la cara de nuestra franquicia por años y representó TODOS los valores de los monstruos del Midway: Brian "Lach" Urlacher!!!
No quiero hablar de su ilustre carrera enfocándome en sus impresionantes números (no por nada es un "first ballot"). Mejor denme la oportunidad de platicarles su carrera desde un enfoque muy, pero muy personal.
Prometo no llorar (o por lo menos no avisarles que estoy llorando)....
1) 2000: WTF!!! ¿UN LINEBACKER BLANCO?
Cuando Lach fue seleccionado por el equipo en el draft del 2000 (9na global) quedé muy decepcionado, ya que quería que seleccionáramos al corredor de Alabama: Shaun Alexander.
En su lugar, teníamos a un safety de Nuevo México que aunque era un fenómeno físico, NO se le veia una posición clara. Tiempo después, cuando Dick Jauron (HC al momento) anunció que sería OLB, concluí que sería un desperdició de selección (OIGANLOOOOOO).
Pero la realidad era más simple, mi mente inexperta NO entendía como un LB BLANCO podría marcar diferencias!!! (ok, además de inexperto... racista).
Los primeros años de su carrera NO fueron nada malos (nuestras temporadas si), y más pronto que tarde (en su temporada de novato) Jauron descubrió que su posición ideal sería MLB. Buen jugador con gran liderazgo pero muy lejos de ser la cara de nuestra franquicia... aún.
2) 2004: NACE EL BINOMIO LOVIE/LACH
Cuando Lovie fue contratado como entrenador en jefe en 2004, traía consigo una mentalidad defensiva de vanguardia. Su versión de la cobertura "Tampa 2" ayudó a los Rams a ganar el Super Bowl y su firme promesa y compromiso de vencer a Green Bay nos tenía extasiados.
Lach, por su parte, se había convertido en el líder absoluto de nuestra defensa, respetado por todos, pero principalmente con hambre de triunfo... hambre de trascender.
La unión de estos 2 elementos empezó a dar resultados casi desde el día 1 y la leyenda de Lach se forjó al liderear una de las defensas más dominantes de la era moderna.
Quizás como fanáticos solo recordemos los tragos amargos de esa época, como la incapacidad de montar una ofensiva decente y las derrotas en juegos clave (incluido un SuperBowl), pero viéndolo en retrospectiva.. fueron buenos tiempos para ser #Bear.
La unión de estos 2 elementos empezó a dar resultados casi desde el día 1 y la leyenda de Lach se forjó al liderear una de las defensas más dominantes de la era moderna.
Quizás como fanáticos solo recordemos los tragos amargos de esa época, como la incapacidad de montar una ofensiva decente y las derrotas en juegos clave (incluido un SuperBowl), pero viéndolo en retrospectiva.. fueron buenos tiempos para ser #Bear.
3) 2012: EL FIN DE UNA ERA
No hay mucho que decir con respecto al final la carrera de Lach, solamente que fue una de las situaciones que se manejaron de la PEOR manera en la historia del deporte profesional y que marcó el final de una era en la NFL.
Tristeza infinita recordar como Phil Emery le mostró la salida por la puerta de atrás, sin respeto por su grandeza y su significado para el equipo. Justicia divina que cuando a él le tocó salir, lo hiciera por la misma puerta.
Me quedo con la satisfacción de que, aunque ya habia empezado a decaer su capacidad física, jamás arrastro la cobija, jamas dio lástimas y sobre todo, JAMAS vistió un uniforme diferente.
Tristeza infinita recordar como Phil Emery le mostró la salida por la puerta de atrás, sin respeto por su grandeza y su significado para el equipo. Justicia divina que cuando a él le tocó salir, lo hiciera por la misma puerta.
Me quedo con la satisfacción de que, aunque ya habia empezado a decaer su capacidad física, jamás arrastro la cobija, jamas dio lástimas y sobre todo, JAMAS vistió un uniforme diferente.
Urlacher fue, es y será por siempre un referente de profesionalismo, entrega y compromiso.
Urlacher fue, es y será por siempre un ejemplo de pasión, rudeza y gentileza.
Urlacher fue, es y será por siempre NUESTRO, solo NUESTRO.
Urlacher fue, es y será por siempre un ejemplo de pasión, rudeza y gentileza.
Urlacher fue, es y será por siempre NUESTRO, solo NUESTRO.
Bear Down!!!!
El Matos
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